Grandes Ecosistemas Marinos (GEMs) OLD
Grandes Ecosistemas Marinos (GEMs)
Los Grandes Ecosistemas Marinos (GEM) son áreas de los océanos del mundo, que abarcan áreas costeras desde cuencas de ríos y estuarios hasta los límites hacia el mar de las plataformas continentales y los márgenes exteriores de los principales sistemas oceánicos actuales. Son regiones relativamente grandes, de orden de 200,000 km² o más, caracterizadas por distintas batimetrías, hidrografías, productividad y poblaciones trópicamente dependientes. La productividad en las áreas protegidas de LME es generalmente más alta que en el océano abierto.
El sistema de GEM ha sido desarrollado por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de los Estados Unidos (NOAA, por sus siglas en Inglés) para identificar áreas de los océanos con fines de conservación. El objetivo es utilizar el concepto GEM como una herramienta para permitir la gestión basada en el ecosistema para proporcionar un enfoque de colaboración para la gestión de los recursos dentro de las áreas transnacionales con límites ecológicos. Esto se hará en un contexto internacional y de conformidad con el derecho internacional consuetudinario como se refleja en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982. Fuente: Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA)
Aunque los GEM cubren principalmente los márgenes continentales y no los océanos profundos y las islas oceánicas, las 66 LME producen alrededor del 80% de la biomasa de pesca marina anual global. Además, los GEM contribuyen anualmente con 12,6 billones de dólares en bienes y servicios a la economía mundial. Debido a su proximidad a las costas desarrolladas, los GEM están amenazados debido a la contaminación oceánica, sobreexplotación y alteración del hábitat costero. NOAA ha realizado estudios de las principales fuerzas impulsoras que afectan los cambios en los rendimientos de biomasa para 33 de los 66 LME, que han sido revisados por pares y publicados en diez volúmenes.
La conservación basada en GEM se basa en el reconocimiento de que las aguas oceánicas costeras del mundo están degradadas por prácticas pesqueras insostenibles, degradación del hábitat, eutrofización, contaminación tóxica, contaminación por aerosoles y enfermedades emergentes, y que las acciones positivas para mitigar estas amenazas requieren acciones coordinadas por parte de los gobiernos y sociedad civil para recuperar poblaciones de peces agotadas, restaurar hábitats degradados y reducir la contaminación costera. Se evalúan cinco módulos cuando se evalúan las LME: productividad, pesca y pesca, contaminación y salud del ecosistema, socio-economía y gobernanza. Se recomienda evaluar periódicamente el estado de cada módulo dentro de un GEM para garantizar el mantenimiento de la salud del ecosistema y el beneficio futuro para los gobiernos gestores. Fuente: Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA)